Funmupaz, la mano amiga para la mujer y niños vulnerables
Promover valores que contribuyan al desarrollo social de mujeres madres cabeza de hogar, de ayudar a la formación de niñas, niños y adolescentes y de tender la mano a personas vulnerables, incluso migrantes, ha sido la misión desde hace 16 años, de la Fundación Mujeres Desarrollando Acciones para la Paz, Funmupaz, cuyo epicentro de acción es Valledupar, pero con influencia en el departamento y el país.
Su creación se dio desde uno de los sectores más vulnerables de la capital del Cesar, Los Guasimales, un barrio subnormal ubicado en la comuna 5 donde la pobreza y las necesidades siempre han estado latentes.
Por fortuna, los ángeles siempre están presentes donde las carencias son palpables, pero más aún donde la crisis social galopa entre las personas más vulnerables que requieren de la promoción de proyectos de impacto social, que contribuyan a mejorar su calidad de vida.
Esta realidad no ha sido ignorada por Katia Duarte Delgan, presidente de Funmupaz, quien con su vocación de servicio ha sabido atender a esa población que ha visto un refugio en esta fundación que además cuenta con el apoyo de organizaciones internacionales.
Las calles empedradas del barrio Los Guasimales conducen hacia este sitio que además funciona en la casa familiar de esta líder social, quien ha dedicado parte de su vida al servicio social ayudando a empoderar a la mujer no solo con la entrega de ayuda, sino también con capacitaciones que le han permitido enfrentar la vida y hacer posible parte de sus sueños.
Funmupaz en la actualidad cuenta con un comedor en el que atienden alrededor de cien niños vulnerables, habitantes del sector, quienes reciben alimentación dos veces al día, tres veces a la semana, y son acogidos con programas sociales que garantizan inclusión y esperanzas en una sociedad golpeada por la indiferencia.
Asimismo, se desarrolla el proyecto ‘Mujer Púrpura’, a través del cual se han capacitado más de 400 mujeres en diferentes áreas con el objetivo de ayudarlas a desarrollar sus ideas de negocio. “Las mujeres cabezas de hogar, mujeres maltratadas, abusadas y excluidas han tenido la oportunidad de recibir formación en áreas de repostería, panadería, manualidades, decoración y en otras áreas que incluso son certificadas por el SENA”, explicó Duarte, quien asegura que a pesar de las adversidades, la misión sigue adelante con el objetivo de atender a quienes lo necesiten en todo el territorio nacional.
APOYO INTERNACIONAL
Para muchos la pregunta es la financiación de esta iniciativa social, y la respuesta es la ayuda firme de organizaciones internacionales, que han visto a través de Funmupaz, llegar a las poblaciones más vulnerables y necesitadas de Valledupar, tomando en cuenta además la ola migratoria por la situación país en Venezuela.
Así las cosas, Duarte explicó que en la fundación es sin ánimo de lucro, de contenido y servicio social enfocado en promover el desarrollo de actividades y formulación de programas que faciliten el mejoramiento de la calidad de vida principalmente de las mujeres cabeza de hogar y los niños, niñas y adolescentes.
Actualmente la fundación cuenta con el respaldo de la Organización Internacional para las Migraciones, OIM, a través del Programa Emergencia & Estabilidad; Mercy Corps, Cruz Roja, Migración Colombia, ONU Mujeres, ANUR, entre otras.
También se ha logrado la articulación con entidades municipales y departamentales, universidades, SENA y otras dependencias que aportan su granito de arena en la formación de la población beneficiaria. Igualmente, cuenta con el acompañamiento de la Policía y el Ejército Nacional en la articulación de actividades de gran impacto.
TRABAJO EN ÁREA DE INFLUENCIA
La presidenta de Funmupaz agregó que el trabajo ha sido de tanto impacto social, que esta misión llega a toda la zona corregimental de Valledupar, así como en el área urbana del municipio con proyección nacional, ya que la meta es abarcar el mayor número de mujeres que necesiten una mano amiga.
“Cuando llegué a Los Guasimales y ver la necesidad de tantos niños y mujeres maltratadas, decidí fundar Funmupaz, a través de la cual quiero llegar hasta las zonas más lejanas como una esperanza para aquellas personas que están sumidas en la pobreza y falta de oportunidades. Ahora la meta a largo plazo es lograr un hogar de paso para albergar a aquellas mujeres víctimas de la violencia y la exclusión, aseguró.
Destaca que la labor no tiene vuelta atrás teniendo como visión la ejecución de programas para el empoderamiento de la mujer, capacitaciones y asesorías a familias, colegios y centros de servicio en las áreas de salud. Asimismo, el acompañamiento psicológico en problemáticas del consumo de droga, embarazos a temprana edad, enfermedades de transmisión sexual en la población adolescente.
La población discapacitada también tiene espacio a través de programas de inclusión, así como los adultos mayores.
“Quiero que las mujeres cabezas de hogar que por alguna razón no pudieron estudiar logren a través de sus conocimientos defenderse en la vida y formarse para empoderarse en la sociedad”, aseguró esta líder social que hace poco fue ONU Mujer como representante del Cesar en territorios nacionales e internacionales.
Duarte resalta que por esta labor social no devenga sueldo alguno, pero afirma que desde la fundación regala alegría a personas que se han sentido excluidas y sin posibilidades de avanzar. En la actualidad Funmupaz vive la sombra de un posible desalojo por ser una zona subnormal en litigio entre la Alcaldía de Valledupar y los propietarios, problema que ya cumple 11 años y ahora amenaza con revivirse en respuesta a una sentencia que ordena al alcalde hacer el desalojo de este sector y otro adyacentes.