Luego de mes y medio de investigación, capturan a presunto triple homicida

Este es alias Joche, presunto responsable del asesinato de tres personas de una misma familia – crédito Policía Nacional

En la última semana, la Policía en el Magdalena ha obtenido resultados positivos al reducir significativamente los delitos de mayor incidencia. Por ejemplo, se destaca la captura de un individuo relacionado con el suceso que costó la vida de tres miembros de una familia en El Cerrito el 7 de octubre de este año.

La investigación, llevada a cabo durante 40 días por la Seccional de Investigación Criminal con el apoyo de la seccional de inteligencia policial, culminó con la emisión de una orden de captura contra el presunto partícipe en este lamentable incidente en El Cerrito.

El individuo, conocido como alias Joche, fue arrestado en el barrio Las Américas en El Banco mediante un requerimiento judicial. Se le imputan los delitos de homicidio y porte ilegal de armas de fuego.

Los agentes judiciales de la Policía Nacional ejecutaron la captura en el mencionado barrio, tras lo cual Joche fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación. En una audiencia pública, un Juez determinó como medida preventiva su aseguramiento en un establecimiento carcelario.

“Con esta captura demostramos nuestras capacidades, instituciones y el trabajo articulado y coordinado existente entre la fuerza pública y autoridades judiciales, en procura de alcanzar a esclarecer los homicidios presentados en el departamento… Estos logros son gracias al esfuerzo constante del trabajo articulado con las demás autoridades judiciales, militares y político-administrativos, comprometidos en garantizar la paz y seguridad en nuestra comunidad”, mencionó el coronel Yorguin Orlando Malagón Hernández, en conversaciones con El Heraldo.

Las autoridades de Barranquilla han detenido a Elio Enrique Bracho Briceño, de 31 años, como el principal sospechoso del asesinato de Samuel Eduardo Cárcamo, un niño de tan solo 6 años.

Presunto asesino de menor de 6 años en Barranquilla capturado por la Policía – crédito Policía Metropolitana de Barranquilla

El pequeño, ingresado en el Hospital Camino Ciudadela 20 de Julio el pasado 19 de noviembre, presentaba graves golpes y politraumatismos, según el reporte médico. La causa de su muerte apunta a posibles actos de agresión física, marcando un episodio indignante que ha conmocionado a la capital del Atlántico.

Las investigaciones del diario local El Heraldo han revelado detalles desgarradores sobre las lesiones encontradas en el cuerpo de Samuel Eduardo: Fractura nasal, mordedura en la lengua y contusiones dispersas pintan un cuadro alarmante que ha llevado a la unidad de investigación Sijín a señalar a Bracho Briceño como presunto responsable.

La captura del sospechoso, ocurrida en el sector de El Rubí, desató una ola de furia entre los vecinos, quienes intentaron lincharlo de forma iracunda. La vivienda, escenario de la tragedia, estuvo al borde del saqueo, obligando a las fuerzas del orden a escoltar a la madre del menor para garantizar su seguridad.

El drama no termina ahí. Según informes, Bracho Briceño habría huido a su residencia después de llevar al niño al centro asistencial. La comunidad, enterada de su regreso, lo esperaba con ira, señalándolo como responsable de la muerte del pequeño Samuel.

Hospital Camino Ciudadela 20 de Julio, Barranquilla. Allí fue atendido el menor, quien llegó sin signos vitales – crédito Raul Caballería Arquitectos

Testimonios recogidos por las autoridades describen un historial constante de violencia por parte del ahora detenido y múltiples hechos de violencia en contra del menor y su madre.

La noche fatal se caracterizó por los desgarradores sonidos de llanto del menor y posibles gritos del padrastro, según algunos vecinos. Cuando la madre regresó, encontró al niño sin signos vitales, y juntos lo llevaron al centro de salud.

La captura de Bracho Briceño fue ordenada por el Fiscal 11 Especializado, Adolfo Niebles Torres, quien lo acusa de homicidio agravado. La operación de retención, llevada a cabo mediante allanamiento y registro, requirió la escolta de uniformados para evitar posibles actos de justicia por mano propia de la indignada comunidad del barrio El Rubí. Con Infobae