Por El Niño, fin de año puede ser caluroso pese a las lluvias, según Ideam
Si bien las fuertes lluvias de finales de octubre e inicio de noviembre pudieron ser devastadoras en varios municipios del país, los últimos informes del Ideam (Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales) indican que existe una fuerte posibilidad del aumento de temperaturas para los últimos días del 2023.
La institución meteorológica ha anunciado que el nivel de las precipitaciones ya está por debajo de los promedios históricos. No obstante, en algunos departamentos las lluvias desencadenaron situaciones de emergencia que obligaron la acción de entidades, como la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastre (Ungrd), que además debió coordinar un Puesto de Mando Unificado (PMU) para poder asistir a la población que resultó afectada por las inundaciones, especialmente en los departamentos del norte del país.
Aún así, en el primer fin de semana de noviembre el Ideam declaró que el fenómeno de El Niño se inició oficialmente. Los síntomas climáticos han sido perceptibles en varias zonas del país, por ejemplo en el Pacífico, región en la que las variaciones de temperatura, de acuerdo con datos oficiales, se ha mantenido medio punto porcentual por encima del promedio por cinco trimestres con el último trimestre con un 1.5% de temperaturas más intensas.
Así lo confirmó la directora del Ideam Ghisliane Echeverry Prieto desde su cuenta de X (Twitter). “Aunque desde junio venimos informando que las condiciones de este fenómeno (El Niño) se encuentran presentes, hoy se cumplen los criterios técnicos , entre ellos, la anomalía de la temperatura en el Océano Pacífico, que ha cumplido cinco trimestres móviles continuos”.
Esto siginifica que las cifras de temperatura comenzarían a incrementarse, se acuerdo con la institución, en diciembre y enero de 2024. Para ampliar, según el último reporte del Estudio Nacional del Agua, los meses de final e inicio de año, por lo general, se caracterizan por una oferta hídrica menor en varias zonas del país al haber menor registro de los niveles de agua en las cuencas abastecedoras, especialmente, de los departamentos de las regiones Caribe y Orinoquía.
Aunque hay fuertes lluvias, las precipitaciones han sido bajas y las temperaturas, altas
En ese sentido, el Ideam ha afirmado que las lluvias que se presentaron en las últimas semanas de octubre e inicios de noviembre son parte de ciclos de aguaceros que, generalemente, se despliegan en el país para dicha temporada: “En octubre y noviembre, gran parte del territorio naciional se encuentran en la temporada de más lluvias, lo que está ocasionando precipitaciones intensas, además de la temporada de ciclones tropicales (en el Caribe)”, argumentó.
Sin embargo, pese a que se presentaron fuertes tormentas, según Echeverry, el promedio de precipitaciones bajó: “aunque no es fácilmente perceptible en la cotidianidad, el monitoreo climático que hacemos en el Ideam ha evidenciado que el promedio de precipitación ha estado por debjao de lo normal y las temperaturas han aumentado de forma significativa”, informó.
Esto significaría que ya las cifras de temperatutra han ido en orden creciente con una intensificación que se haría mucho más evidente entre el diciembre y enero 2024, meses de alta sequía, la cual, en términos de Echeverry, podría “intensificarse”.
Así las cosas, caben en el escenario mayores vendavales y ausencia de recursos hídricos en áreas planas del Caribe, por ejemplo, y condiciones secas en zonas centrales del país, que estarían acompañadas de heladas en las madrugadas.
Christian Euscátegui, experto en meteorología y alertas tempranas, le explicó a El Tiempo el la cadena de efectos: “esta situación implica no solamente menores cantidades de llvias en relación con lo normal, sino a su vez un aumento en las temperaturas máximas, lo que se traduce en mayotres niveles de evaporación y evatranspiración (evaporación desde el suelo y las plantas más la transpiración de las plantas), incrementándose así el estrés hídrico”, señaló. Con Infobae