Empresa francesa anunció que se va del país y suspnde proyecto de energías limpias en Girardot

La empresa EDF Renewables anunció que se retira de un proyecto de energía solar en Girardot, Cundinamarca, en el que venía participando desde el 2021.

Las razones que dieron lugar a la salida fueron los “retrasos significativos en los permisos y licencias ambientales por parte de las entidades locales” que hicieron que la empresa francesa saliera “del desarrollo energético en la planta energética de Girardot, Cundinamarca”, según un comunicado de prensa y una entrevista publicada por Caracol Radio.

EDF Renewables hizo parte de la iniciativa que busca propulsar el desarrollo de proyectos con energías limpias en Colombia desde 2021, luego de que “ganara la subasta de energía de largo plazo impulsada por el Gobierno para la realización de dos proyectos de gran calado de energía solar por 145 MWP”, como indica el documento. Se le concedió a esta corporación la adjudicación debido a el “precio competitivo, favoreciendo directamente al usuario final, y la diversificación de la matriz energética nacional”.

Las circunstancias también han sido consecuencia “de cambios regulatorios y fiscales que han ocurrido desde que sucedió la subasta” en la que el proyecto de Girardot fue concedido a la corporación europea. Un ejemplos de estos cambios, según el comunicado, fue “la reforma tributaria que impactó las rentabilidades de los proyectos y los beneficios de la Ley 1715 para promover las energías renovables”. De la misma manera, en un contexto más global de la economía en el que se dieron “alzas en las tasas de interés y la volatilidad de la tasa de cambio”, asuntos que implicaron que el proceso se dificultara aún más.

Sumado a esto, el punto central de la retirada de la compañía energética francesa fue “la no otorgación de los permisos y licencias por la corporación regional, la cual incumplió los plazos establecidos en el Decreto 1076 del 2015″, afirmó el comunicado.

En entrevista con Caracol Radio, la gerente general Elodie Sangalli lo confirmó: “Fuimos adjudicados en un proceso de subasta en 2021 y esperábamos la licencia ambiental en diciembre de ese año, recibimos la licencia tres años después, en junio del 2023 y desde agosto nuevamente se nos salió con unas condicionantes que no permiten iniciar la construcción del proyecto”. A estas declaraciones añadió que los inversionistas no van a “esperar tres años por una licencia debería tardarse normalmente un año”.

El documento también explica que, si bien el 8 de septiembre de 2023 el Consejo de Estado anuló el marco regulatorio de la subasta porque se consideraba inconstitucional, el mismo Gobierno resolvió dar la orden de “ejecutar las garantías de puesta en operación del proyecto por un monto de más de 4.600 millones de pesos”, no considerando las comunicaciones y los “esfuerzos para que esto no sucediera”.

Sangalli lo explicó de forma más precisa en su entrevista: “nos ejecutaron una garantía de cerca de 4.600 millones como castigo por el atraso de la licencia en el punto de conexión”.

Además, denunció que pese a las decenas de intentos de comunicación, ni el mandatario ni el ministro de Minas y Energías les han contestado.

Por su parte, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, “lamentó la decisión. También, en entrevista con Caracol, garantizó que están “trabajando en la ANLA, (…) sin embargo las corporaciones autónomas (CAR) han tenido un proceso de rezago y de falta de claridad en los trámites”. Allí mismo, hizo un llamado a “las empresas, el ministerio tiene las puertas abiertas para trabajar de la mano con ustedes en, precisamente, la atención a esos trámites ambientales que puedan estar detenidos sobre todo para procesos energéticos”.

En la misma línea se expresó sobre un proyecto de ley que se llevará al Congreso con el propósito de “agilizar los trámites de licenciamiento ambiental para proyectos de las energías renovables”, concluyó la funcionaria, a la vez que reitero lo “lamentable” de la situación y mandó un mensaje de que desde su despacho “quisieran avanzar mejor”.

En referencia al retiro de la empresa francesa, la ANLA también se pronunció desde X (anteriormente Twitter), y destacó que “el proyecto objeto de licenciamiento ambiental en Girardot Cundinamarca no era competencia de la ANLA, sino de CAR”. De la misma manera, la Autoridad Nacional del Licencias Ambientales, recalcó que “responde con oportunidad y transparencia solicitudes” a la vez que, según la entidad, suman a la transición energética justa. Con Infobae