Campesinos e indígenas en Nariño están huyendo por enfrentamientos armados
En el occidente del departamento de Nariño, específicamente en los municipios de Samaniego y Santacruz, la crisis humanitaria se ha agravado debido a un desplazamiento masivo que ha afectado a más de 800 indígenas del resguardo del Sande y a más de 2.000 campesinos. Esta situación ha sido causada por los intensos enfrentamientos entre las disidencias de las Farc y el ELN en su lucha por el control territorial.
En Samaniego, el casco urbano ha acogido a 2.025 campesinos que han estado desplazados durante más de un mes. Estos campesinos provienen de 18 veredas ubicadas en la zona montañosa del municipio. La escalada de violencia ha obligado a estas comunidades a abandonar sus hogares y buscar refugio en el área urbana.
El resguardo indígena awá El Sande emitió un comunicado informando que este último desplazamiento se debió a combates entre grupos armados que comenzaron el 13 de septiembre. En este éxodo forzado se encuentran 800 indígenas, incluyendo mujeres embarazadas, niños y adultos mayores. Se espera que otras 600 personas se unan a ellos a lo largo del día.
La situación ha sido reportada a las autoridades locales, incluyendo el gobernador de Nariño, Jhon Rojas, y el secretario de Gobierno, José Obregón. Se ha solicitado la activación de rutas de atención de emergencia humanitaria, de acuerdo con una publicación del periódico colombiano El Tiempo.
Las comunidades afectadas han expresado que, debido a los violentos enfrentamientos, hay informes de población civil herida. Además, en las veredas Claraval y Campoalegre en el municipio de Santacruz, varias familias se encuentran confinadas en sus viviendas. Han colocado banderas blancas como señal de paz para evitar ataques de grupos armados en sus espacios de convivencia civil, de acuerdo con ese medio de comunicación.
70 familias en Riohacha fueron desplazadas por enfrentamientos entre grupos armados
La Defensoría del Pueblo alertó por la ola de violencia que vive el municipio de Riohacha y el aumento del desplazamiento forzado a causa de los enfrentamientos entre grupos armados ilegales en la región de La Guajira.
A través de la Alerta Temprana de Inminencia 025 de 2023 emitida por la entidad el pasado 21 de junio de 2023, con la cual advirtió el escenario de riesgo que se venía configurando en el departamento, se informó del desplazamiento de 70 familias que tuvieron que emigrar de sus corregimientos Tigreras y Matitas.
Durante agosto de 2023, la Defensoría registró masivos asesinatos y secuestros que afectaron a la población en general asentada en sus áreas urbana y rural.
Estos hechos de violencia se atribuyen a los constantes combates entre dos principales guerrillas: las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AUC), las cuales están en disputa por el control territorial.
“Los hechos violentos son el resultado de la disputa entre las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada y el frente Francisco José Morelos Peñate, bloque Nelson Darío Hurtado Simanca, de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia. Estos dos grupos armados están enfrentados por el control territorial de la Troncal del Caribe y sus áreas circundantes”, señaló el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
De acuerdo con la Defensoría del Pueblo, tan solo en los primeros seis meses del 2023 se presentaron 59 desplazamientos masivos, que equivalen a 18.755 personas sacadas a la fuerza de sus territorios por culpa de la violencia – crédito Indepaz
Tras la incursión de hombres armados en Tigreras y el asesinato subsiguiente de un hombre de 31 años el 13 de agosto de 2023, las autoridades informaron la liberación de una persona en el mismo corregimiento. Este tuvo lugar en el contexto de un enfrentamiento entre tropas del Ejército Nacional y miembros de las Autodefensas. Según la Defensoría, el incidente resultó en la captura de seis presuntos miembros del grupo ilegal y ha sumido a la comunidad en un estado de incertidumbre y temor. Con Infobae