Capturaron al presunto asesino de patrullero asesinado en Antioquia
El país atraviesa uno de sus momentos más críticos de los últimos años en materia de orden público. Los grupos armados han incrementado su presencia en distintas regiones del territorio nacional, dejando cientos de miembros de la fuerza pública asesinados, tal como fue el caso del patrullero Darwin Ozías Lloreda Zúñiga.
El uniformado, de 37 años, se encontraba en pleno ejercicio de sus labores como miembro de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía de Urabá, cuando criminales de los grupos armados que operan en la región dispararon contra él y uno de sus compañeros, que logró salir con vida. Los hechos se registraron sobre las 5:00 a. m. del jueves 17 de agosto de 2023, en inmediaciones al peaje de Mutatá, en el Urabá antioqueño.
Tras el crimen, las autoridades desplegaron un operativo en el que se logró la captura de uno de los criminales que participó del asesinato del uniformado. El comandante de la Policía de Urabá, coronel William Alberto Zubieta Pardo, indicó que el sindicado ya se encuentra a disposición de la Fiscalía General de la Nación, además de ofrecer una importante recompensa para quien dé información sobre el paradero de los otros criminales que participaron del homicidio.
“Dimos la captura de un sujeto que presuntamente participó de estos hechos, está en este momento en proceso de judicialización y, así mismo, articulados con las diferentes autoridades, ofrecemos una recompensa de hasta 50 millones de pesos a quien de información que conduzca a la captura de estos delincuentes”, indicó el comandante de la Policía de Urabá, coronel William Alberto Zubieta Pardo
El patrullero Darwin Lloreda, que era oriundo del municipio de Pueblo Nuevo (Córdoba), llevaba 15 años en la Policía Nacional y completaba cuatro como miembro de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía de Urabá. Por su parte, el patrullero Franco Escobar, que resultó herido en una de sus piernas tras el atentado, tiene siete años adscrito a la seccional.
Este nuevo crimen contra uniformados se registra luego de varias semanas en las que los miembros de la fuerza pública se han convertido en blanco de los grupos armados en el país. De hecho, durante el primer semestre del 2023, las autoridades reportaron 38 policías asesinados en todo el territorio nacional.
Además, en la zona donde se registró el asesinato del patrullero Lloreda, el Urabá antioqueño, estructuras criminales tales como el Clan del Golfo o también llamadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia han incrementado sus operaciones en los últimos meses. Los frentes de esta estructura armada que más han sembrado terror en esta región del país son el Edwin Román Velásquez y Carlos Vásquez.
Precisamente, para comienzos de julio de 2023, las autoridades concretaron la captura de uno de los cabecillas más importantes de esta estructura armada. Fernando Gallego González, alias Mono Guasa, era uno de los jefes sicariales del Clan del Golfo, sindicado ser responsable de múltiples homicidios durante el último año en los municipios de Apartadó, Mutatá, Carepa y Chigorodó, en Antioquia.
El sujeto tenía a su disposición varios hombres que se encargaban de ejercer control sobre la venta de estupefacientes y el cobro de extorsiones. Por tal motivo, Gallego González mantuvo una disputa con otras estructuras delictivas, enfrentamientos que dejaron decenas de personas asesinadas en esos municipios.
Mono Guasa llevaba más de 10 años vinculado a esta estructura criminal. En 2012 fue capturado y posteriormente condenado. En 2018, salió de la cárcel luego de cumplir con la pena que le fue impuesta en aquella oportunidad y se volvió a reincorporar a la subestructura Carlos Vázquez. Con Infobae