Estos son los cambios en la reforma tributaria para su segundo debate
Este miércoles 2 de noviembre se realizará el segundo debate en las plenarias de Senado y Cámara sobre la reforma tributaria, cuyo primer debate fue el pasado 6 de octubre, y el Ministerio de Hacienda ya presentó el informe sobre su ponencia.
Varias modificaciones tuvo el proyecto de ley, teniendo en cuenta que el monto de su recaudo pasó de 25 billones de pesos al año a solo 20. Para empezar, se mantiene el impuesto a los alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas, pero algunos productos ya no serán sujetos del impuesto, que tendrá una tarifa gradual empezando en 10 % en 2023, 15 % para 2024, y 20 % para el 2025.
Quedaron por fuera de la lista las grasas naturales como el maní y los frutos secos y derivados de la leche como el queso. También ha quedado por fuera el pan artesanal y embutidos como el salchichón. Pero, se mantienen productos como la galletería, confituras y helados.
Otro de los cambios más sustanciales es la eliminación del impuesto a las pensiones, que había empezado en un gravamen para las de más de 10 millones, luego pasó a las de más de 13 en el primer debate, y ahora ha sido descartado por completo. Este impuesto habría sido aplicado al 1 % de los retirados y representaba un recaudo de 350 millones.
También resalta que los petroleros y mineros deberán pagar una sobretasa de renta que va a variar según el precio internacional del crudo en los últimos 10 años sin contar el año de tributación. Antes, se tomaba el precio de los últimos 20 años. Este sector pondría 9 billones de pesos anuales al presupuesto nacional.
Los gremios del sector han criticado fuertemente esta propuesta, argumentando que afectaría su competitividad y viabilidad, así como el desarrollo de la producción de petróleo y la generación de aportes fiscales para el país y las regiones.
“Si las inversiones en la industria disminuyen, caerán la producción y, en consecuencia, los aportes de este sector al país y las regiones. Se está pensando en el corto plazo y no en cómo mantener y aprovechar una industria y sus recursos, que son clave para las finanzas públicas y la financiación de los programas de desarrollo en las regiones y para todos los colombianos”, afirmó Francisco José Lloreda Mera, presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo, ACP.
Por otra parte, quedó incluida la medida de la cárcel para evasores. El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, explicó que la prisión será para reincidentes: “el primero paga, el segundo paga con una multa adicional y la tercera vez va a la cárcel”.
También indicó que la idea es penalizar a quienes evadan más de 1000 millones de pesos, teniendo en cuenta que actualmente la sanción es por encima de los 5000 millones, y quienes pagan no deben pagar la pena de cárcel. A su vez, el senador del Partido Conservador Efraín Cepeda añadió:
“Se extingue la pena si se paga la primera vez, si la segunda vez ocurre nuevamente una evasión la pena se extingue solo en un 50% y ya la tercera vez la pena no se extingue”.
Respecto al patrimonio, a partir de 3000 millones se aplicaría una tarifa marginal del 0,5 %; a partir de 5000 millones del 1 %; y desde 10.000 millones del 1,5 %. Otro impuesto adicional sería el de las ganancias ocasionales, que pasaría a ser del 15 % (actualmente es del 10 %), con excepción de las loterías, que serían del 35 %.
Adicionalmente, las hidroeléctricas tendrían una sobretasa adicional de 3 puntos, mientras que las entidades financieras tendrán una sobretasa de 5 puntos. Los dividendos quedaron con una tasa que irá del 0 al 20 %. Con Infobae