Israel redujo el tiempo de aislamiento de casos positivos asintomáticos de diez a siete días
El Ministerio de Sanidad de Israel anunció el martes que quienes obtengan resultados positivos en pruebas de coronavirus podrán aislarse por siete días en lugar de diez en caso de que no presenten síntomas a partir del quinto día.
“No obligaremos a las personas a permanecer en cuarentena más tiempo del necesario, para proteger su salud, así como la economía, la educación, la cultura y continuar con una vida normal tanto como sea posible en paralelo con el coronavirus”, señaló el ministro de Sanidad, Nitzán Horowitz.
La decisión fue anunciada en un comunicado del ministerio, que precisó que un estudio realizado en pacientes portadores de la variante ómicron reveló que tan solo un 6% presentaron signos del virus pasado el séptimo día.
“Decidimos reducir el número de días de aislamiento tras examinar la cuestión e identificar que las posibilidades de infección pasada la semana son bajas”, explicó el director general de Sanidad, Nachman Ash.
Esta medida llega en un momento de creciente preocupación en Israel por las dificultades que el aislamiento de portadores del virus ha causado en el mercado laboral, algo que algunos expertos prevén que generará perdidas superiores a los 500 millones de euros.
Las últimas cifras de contagios difundidas por Sanidad indican que ayer se registraron casi 38.000 nuevos casos, el número más alto desde el comienzo de la pandemia y que elevó la cifra de casos activos a más de 185.000, 247 de ellos en estado grave.
Sin embargo, en la misma jornada se registraron apenas dos muertos, además de 185.753 casos activos en el país, incluidos 247 pacientes en estado grave, entre ellos 79 en estado crítico y 13 conectados a respiradores a causa del COVID-19.
En este contexto, el primer ministro, Naftali Benet, ofreció una conferencia de prensa en la que aseguró que el Gobierno buscará mantener la economía funcionando pese a los contagios y que la prioridad será proteger a los adultos mayores y los pacientes de riesgo.
El domingo, Benet había dicho que entre dos y cuatro millones de israelíes podrían contagiarse de COVID-19 durante esta ola, antes de pedir a la población que tenga paciencia y entienda las medidas de las autoridades.
Ese día Israel decidió reabrir sus fronteras a turistas vacunados o recuperados tras mantenerlas cerradas durante más de un mes por temor a la propagación de la variante Ómicron.
Quienes quieran ingresar a Israel con visado de turista podrán hacerlo en tanto cumplan los requisitos de vacunación establecidos por el Ministerio de Sanidad. Estos exigen un programa de vacunación completo con cualquiera de las vacunas aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) o con la vacuna Sputnik, siempre y cuando no hayan pasado más de seis meses desde la administración de la última dosis.
Quienes hayan pasado la enfermedad, deberán demostrar que han obtenido un resultado positivo a una prueba de coronavirus en los últimos seis meses o que han recibido al menos una dosis de una vacuna aprobada por la OMS, ya sea antes o después de su resultado positivo.
Los turistas que ingresen al país deberán presentar una prueba de coronavirus negativa realizada en las 72 horas previas a su viaje y realizarse otra en el aeropuerto a su llegada, tras la cual deberán permanecer en cuarentena hasta obtener un resultado negativo.
(Con información de EFE)