Cayó ‘expara’ por muerte y desaparición de investigadores del CTI
En Valledupar fue capturado el exparamilitar Óscar Dario Cuadrado, presunto responsable de la muerte y desaparición de siete investigadores del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía, en hechos ocurridos el 9 de marzo de 2000.
Este sujeto deberá responder bajo la Ley 600 ante un fiscal de la Unidad de Derechos Humanos, por los delitos de desaparición forzada, homicidio agravado y concierto para delinquir agravado.
Se le sindica de participar en la masacre en la que murieron los investigadores Carlos Ibarra, Israel Roca, Mario Anillo, Hugo Quintero, Edilberto Linares, Danilo Aguancha y Jaime Barrios.
Las investigaciones dan cuenta que las víctimas salieron desde Valledupar con destino a Codazzi, ya que ese 9 de marzo de 2000 realizarían la exhumación del cadáver de Tiburcio Rivera, un vendedor de paletas también asesinado por paramilitares. Los trabajos estaban previstos en zona rural entre Minguillo y la trocha de Verdecia, donde se presume fueron emboscados los agentes del CTI, cuyos cuerpos aún se encuentran desaparecidos.
Al mes de su desaparición se encontró una de sus camionetas, enterrada debajo de rastrojos. Se supo de la otra un año después, estaba incinerada y enterrada en la finca La Holanda, en zona rural de Codazzi.
Los funcionarios judiciales cayeron en poder del frente Juan Andrés Álvarez del Bloque Norte de las Autodefensas, comandado por John Jairo Esquivel, alias El Tigre, en momentos en que llegaron a la hacienda ‘Holanda’, en el municipio de La Paz.
Alias El Tigre, relató que la orden de asesinarlos la dio el jefe máximo de las AUC Carlos Castaño Gil. El Tigre entregó además las coordenadas de las fosas comunes, a orillas del río Cesar, pero nunca las hallaron en más de 100 excavaciones.
Las versiones de los desmovilizados que han confesado su participación en la masacre crean confusión. Alcides Manuel Mattos, alias el Samario, desmovilizado del frente Juan Andrés Álvarez de las AUC, declaró en una audiencia que recibió los restos en siete sacos y los arrojó al río Cesar desde el puente Rabo Largo, en el centro del departamento.
También es de resaltar que por estos hechos fue condenado Rodrigo Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’, quien En 2012, el Juzgado Penal del Circuito de Descongestión Adjunto de Valledupar condenó a 25 años de prisión. De acuerdo con el fallo, habría ordenado la muerte de los siete agentes. Durante las versiones de los exparamilitares algunos confesaron su participación en los hechos.