26 de noviembre
General

Alerta naranja en Manaure por riesgo de deslizamiento de tierras

Un nuevo episodio de emergencia, vivieron los habitantes de la vereda Canadá, en el municipio de Manaure Balcón del Cesar, luego de un fuerte aguacero registrado la tarde del martes, que provocó deslizamientos de tierra y taponamiento de las vías, pérdida de cultivos y el colapso del acueducto del municipio.

Fueron tres horas de lluvia y con ella inundaciones que además arrasaron con cultivos de cilantro, tomate y otras producciones de los campesinos de la zona, quienes afirman que todos los años viven la misma calamidad y quedas prácticamente sin vías de acceso, ya que la creciente del arroyo El Indio, estribaciones de la Serranía del Perijá, acaba con todo a su paso.

Son alrededor de 500 familias afectadas, además de la afectación al acueducto que tiene la planta de tratamiento en un 25% de capacidad, ya que se acumuló sedimento, rocas y todo cuanto arrastró el arroyo El Indio, donde se registra el problema. En Consejo Municipal de Riesgo, se declaró alerta naranja para monitorear las zonas vulnerables a deslizamientos como Sabana de León, Pie de Cielo y en gran parte del área rural del municipio.

Jorge Luis Ramírez, habitante de la vereda Canadá, manifestó que el fuerte aguacero los mantuvo en vilo durante toda la tarde. “La fuerza del arroyo se llevó la bancada de la carretera y quedamos prácticamente sin vías, y esto es fatal, ya que sin vías no hay producción, a pesar de las ganas de trabajar que tienen los campesinos.

“Fueron varias horas de miedo y temor. La fuerza del agua era tremenda y el deslizamiento se registraba con gran fuerza, es lamentable que cada año vivamos esta situación, por lo que pedimos a las autoridades atención para evitar una tragedia mayor”, dijo.

ALERTA NARANJA

José Alfonso Reyes, apoyo de la Oficina Municipal de Gestión del Riesgo en Manaure, explicó que la falla registrada en el arroyo El Indio provocó deslizamientos en masa afectando la vereda Canadá, el acueducto de Sabana de León y el principal del municipio.

Ayer mismo se trasladó al lugar la maquinaria, con el apoyo de la Oficina Departamental de Gestión del Riesgo, para destapar las vías como primera acción. No hubo pérdidas humanas, solo taponamiento de vías y la bocatoma de la planta de tratamiento, cuyo inconveniente se está superando, ya que los canales de acceso se llenaron de sedimentos.

Destacó el funcionario, que en reunión del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, se decidió declarar alerta naranja por la existencia de zonas vulnerables a deslizamientos de tierra en la zona rural.

La alerta consiste en hacer monitoreos tres veces al día a los escenarios propensos a ser afectados por esta segunda temporada de lluvia. Se está contando con el respaldo de Defensa Civil, Ejército Nacional, Policía y organismos de socorro del departamento.

ALERTAS EN EL CESAR

De acuerdo al boletín 237 del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, en el departamento del Cesar se han declarado las siguientes alertas, por riesgo de deslizamientos de tierra.

En Valledupar hay alerta roja, al igual que en el municipio de Pueblo Bello. Alerta naranja en La Gloria y Manaure Balcón del Cesar; y amarilla en los municipios de Agustín Codazzi, Becerril, Chimichagua, Chiriguaná, Curumaní, El Copey, González, La Jagua de Ibirico, La Paz, Pailitas, Pelaya y San Diego.

En cuanto a las cuencas hidrológicas, anuncia probabilidades de crecimientos súbitos en los niveles de la parte alta del río Cesar y sus afluentes, recomendando especial atención en el río Guatapurí, a la altura del corregimiento de Chemesquemena.

En la cuenca media del río Cesar, se recomienda a las autoridades monitorear los municipios de Valledupar, Pueblo Bello y Agustín Codazzi, donde se podrían registrar afectaciones por desbordamientos e inundaciones. Mientras que en la cuenca baja del afluente, las acciones deben ir orientadas a los municipios de La Jagua de Ibirico, Chiriguaná, Curumaní y Chimichagua.

Las lluvias serán intensas durante las próximas horas en el Cesar, al igual que en la mayoría de los territorios del Caribe Colombiano.

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