24 de noviembre
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Mi sueño era volver a la tarima junto a Jorge Oñate: Rosendo ‘Chendo’ Romero

“Quiero morirme como mueren los inviernos/bajo el silencio de una noche veraniega/ quiero morirme como se muere mi pueblo/serenamente sin quejarme de esta pena…”, esta estrofa de la canción ‘Noches sin Luceros’, es solo una pizca de los recuerdos que el compositor Rosendo ‘Chendo’ Romero Ospina tiene con Jorge Oñate, y con quien soñaba volver a la tarima del Festival de la Leyenda Vallenata, para hacer música en grande y retomar la esencia poética del género vallenato.

“Expreso mi alegría de recibir el reconocimiento de la Fundación del Festival de la Leyenda Vallenata en la versión 54º del evento folclórico más importante del Cesar y gran parte del país, pero a la vez siento mucha nostalgia de no poder estar al lado del maestro Jorge Oñate, quien fue la persona que me consagró como compositor al grabar ‘Noches sin Luceros’, mi primer éxito”, afirmó.

Amable, jocoso pero lleno de romanticismo y amor por el vallenato, Rosendo no dudó en dialogar el País Vallenato para alagar lo que este año se desarrollará durante el Festival de la Leyenda Vallenata. Son decisiones acertadas, en medio de una pandemia que ha tomado por sorpresa a la humanidad.

Virtual o presencial, durante esta versión del festival, cada melodía que suene y cada acordeón que se abra, será pensando en la voz de ‘El Jilguero de América’, con “quien no pude cumplir mi sueño de volver a cantar ‘Noches sin Luceros’”, afirmó.

Destacó que la FFLV toma determinaciones muy acertadas, incluso es de aplaudir que la versión 55 del festival, Quinto Rey de Reyes sea en honor a Jorge Oñate, será un gran momento que solo Dios sabe porque lo quiso así.


PREPARO ALGO ESPECIAL

Manifestó el compositor que en agradecimiento a la iniciativa de la Fundación del Festival de la Leyenda Vallenata, prepara un espectáculo que compartirá en tarima junto a sus compositores más allegados, cuyos nombres dará a conocer más adelante.

“La idea es llevar a la tarima, de manera virtual o presencial, un espectáculo que le permita al público no solo ver una ceremonia, sino un buen acto respondiendo a esa distinción que me hacen, de pronto hasta prepare una composición especial”, dijo entre risas.

Recordó ‘Chendo’ Romero que antes de Jorge Oñate la música vallenata estaba muy escondida, era rechazada, la gente la consideraba como la música de los campesinos. Del mercado se habían adueñado Aníbal Velásquez, los boleros centroamericanos, rancheras y las baladas argentinas y españolas, ya que para la época había un ídolo llamado Nino Bravo, cantante español con una voz tronante como la de Jorge Oñate.

Pero en medio de este trajinar musical, irrumpe Oñate con los Hermanos López y saca de las cantinas, de los lugares públicos a las orquestas, las rancheras y empieza sonar el vallenato como tal.

“Recuerdo que en mi cuarto tenía un afiche con la fotografía de Nino Bravo, que recorté del diario El Espectador, y lo quité para poner uno de Jorge Oñate. Para empezar a soñar con la grabación de una canción por parte del maestro”.

Y la bendición llegó, en el año 1976 Oñate consideró Noche sin Luceros, canción con la que “me consagra como compositor de competencia, y eso me unió con él para toda la vida, el primer poema cantado que se graba en el vallenato”, manifestó con gran alegría.

Destacó que el Festival Vallenato al distinguirlo con Jorge Oñate, descifra un mensaje al público, de que el vallenato debe seguir siendo poético, “era mi sueño, cantar de nuevo Noche sin Luceros junto al maestro”.

¿QUIÉN ES ROSENDO ROMERO?

Nació en Villanueva , departamento de La Guajira el 14 de junio de 1953 y miembro selecto de la dinastía de los Romero (hermano del acordeonero Israel, del Binomio de Oro, e hijo de Escolástico Romero).

Es compositor desde el año 1972, mismo año en que muere su colega Freddy Molina.

Sus temas han sido inmortalizados por voces que van de la de Diomedes Díaz y Jorge Oñate, pasando por Juan Piña, el Binomio de Oro, Silvio Brito, Kike Ovalle, Jorge Celedón, Otto Serge, Alfredo Gutiérrez y hasta el argentino Leonardo Favio.

Es autor de temas como: ‘La custodia del Edén’, ‘La caída’, ‘Corazón de oro’, ‘Fantasía’, ‘Mi poema’, ‘Romanza’, ‘La montañera’ y ‘Tardecita de lluvia’. Ha recibido entre otros galardones la mención de Honor al Mérito Folclórico, otorgada por Sayco, así como reconocimientos en cinco festivales de la región Caribe: San Juan del Cesar en la Guajira, y Arjona, San Jacinto, San Juan Nepomuceno y Ayapel, en el departamento de Bolívar.

Rosendo Romero es uno de los compositores que ha encumbrado el vallenato a los sitios donde se ubican las más destacadas músicas del mundo. Sus canciones se armonizan con las notas más líricas del pentagrama vallenato, y por casi medio siglo ha permanecido escribiendo versos que transportan el sentir colectivo.

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