A la espera del maestro Jorge Oñate

Con carteles, afiches, pañuelos de color blanco y vestidos de lutos, fanáticos de Jorge Oñate esperan la llegada de su cuerpo a las afueras de la pista de aterrizaje del Areopuerto Alfonso López Pumarejo de Valledupar.

Se estima que el féretro esté llegando a las 3:30 de la tarde de este domingo cuando se apagó la voz del Ruiseñor, seudónimo que le impregnó el periodista Juan Gossaín.
Entre quienes lo esperan está quien fue su manager por muchos años Mario Puerta, manifestando que se ha ido una de las figuras más relevante de la música vallenata.
«Jorge Oñate fue el primer cantor del folclor vallenato, se ha ido un grande», dijo Puerta.

Dijo que para esta tarde no hay desfile programado «pero el público no lo contiene nadie hay incontables vehículos con música del Ruiseñor esperando el féretro, a lo que aterrice el avión el cuerpo será llevado hasta la biblioteca departamental donde la Gobernación del Cesar le hará un homenaje luego nos vamos al municipio de La Paz donde a las 7:00 p.m., la administración municipal le rendirá un homenaje póstumo», relató.

El féretro hará el recorrido por la avenida Simón Bolívar de Valledupar para luego tomar la avenida Fundación hasta llegar a la biblioteca departamental.
«Invitamos a los fanáticos a guardar las distancias y los protocolos de bioseguridad. Los entes gubernamentales tributarán al Jilguero de América. Por el factor tiempo no se logró armar una tarima que se estaba ensamblando y a última hora se decidió colocar el féretro al interior de la biblioteca», dijo Mario Puerta.

El sepelio de Jorge Oñate se realizará el lunes a las 4:00 de la tarde en el cementerio municipal de La Paz.

Por su parte Joaquín Guillen también está a la espera de la llegada del cuerpo a la terminal aérea.

Se nos fue un ícono del folclor vallenato, fui tres años manager de él y es lo mínimo que puedo hacer acompañarlo hasta su última morada porque se lo merece», dijo Guillen.
Otra de las personalidades en llorar su inesperada partida es el Rey Vallenato Raúl ‘Chiche’ Martínez, quien grabó junto con el Jilguero de América tres producciones discográficas, cuando apenas tenía 19 años.

«Esta es una pérdida irreparable tengo el corazón partido y me da mucha tristeza, yo grabé con él a los 19 años en el año 1978, hicimos tres LP, el primero fue ‘Cambio de mi vida’, luego fue ‘Siempre unidos’, y por último en el año 1980 hicimos ‘Noche de Estrellas’, una canción de Roberto Calderón que fue éxito total, al igual que la ‘Vieja Sara’ y muchas más que fueron gran éxito. Fue un reto muy fuerte para mí porque me tocó reemplazar a Nicolás ‘Colacho’ Mendoza, que fue maestro de maestro de maestros».