En cementerio de Pivijay, Magdalena, pasaron ataúd por la tapia y ni le avisaron a las autoridades

Bajo el inclemente sol del municipio de Pivijay, Magdalena, la comunidad protestó por el sepelio clandestino de un hombre con aparente síndrome de Down que, al parecer, era sospechoso para coronavirus y que un grupo de funerarios pretendía inhumar por la parte de atrás del cementerio municipal.
El inusual hecho se hizo tendencia en redes sociales y llamó la atención de la ciudadanía porque con trajes especiales de bioseguridad, el personal de la funeraria llegó en una camioneta negra al campo santo y en silencio intentaron ingresar el cadáver del sujeto que, según las autoridades, no tenía familiares y por protocolos del Ministerio de Salud, debía ser sepultado bajo esas normas especiales.
“El paciente presentaba un cuadro anémico, dificultad para respirar, empeoró, lo llevaron al centro de salud y fallece. Tengo entendido que ese cementerio tiene dificultades para pasar los cadáveres y este caso por ser sospechoso – estamos en respuesta del resultado – el manejo tiene que ser como se hizo”, dijo Jair Briceño Pérez, gerente del Hospital de Zapayan, Magdalena.
Por su parte, la Policía del Magdalena una vez presentado este incidente en el municipio indicó que “atendió el caso de manera inmediata y que gracias a la mediación de las autoridades del municipio se aclaró la situación y se adquirieron compromisos para que se sigan los protocolos al momento de realizar este tipo de sepelios”.
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