EEUU acusa a talibanes de incumplir su compromiso de reducir la violencia
Las Fuerzas estadounidenses en Afganistán acusaron este sábado a los talibanes de incumplir sus compromisos de reducción de la violencia establecidos en el histórico acuerdo que firmaron en Doha el pasado 29 de febrero, en lo que supone la primera llamada de atención de Estados Unidos desde entonces.
Reconocemos la reducción de la violencia contra las ciudades y las fuerzas de la coalición. Pero se habló de que todas las partes redujeran la violencia hasta un 80 % para allanar el camino para las conversaciones de paz”, afirmó en un comunicado el portavoz de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, el coronel Sonny Leggett.
Según el portavoz, desde la firma del acuerdo se han respetado algunos de los compromisos alcanzados, “pero otros no”, y entre esos está un “incremento drástico de la violencia” por parte de los talibanes, en contraposición con la reducción de los ataques a casi cero de la semana previa a la firma del documento en Doha.
Hace un mes, los talibanes habían culpado ya a Estados Unidos de “repetidas violaciones” del acuerdo, al llevar a cabo numerosos bombardeos contra bases insurgentes y zonas civiles, un extremo que negaron las fuerzas estadounidenses, al asegurar que sus ataques eran de carácter defensivo, nunca ofensivos.
En Doha, acordamos que las fuerzas estadounidenses y de la coalición continuarían colaborando, apoyando y, cuando fuera necesario, defendiendo, a nuestros hermanos y hermanas afganos. Nos tomamos nuestra responsabilidad muy en serio”, remarcó el portavoz, subrayando que no han llevado a cabo “un solo ataque u operación ofensiva”.
El Gobierno afgano también culpó a los talibanes de un incremento de la violencia a pesar de los esfuerzos de paz.
El portavoz del Ministerio de Interior, Tariq Arian, afirmó hoy en una rueda de prensa que “el incremento de los ataques talibanes” en los últimos dos meses han dejado 387 civiles muertos y otros 590 heridos.
Este es un crimen imperdonable y tales actos van en contra de los valores humanos e islámicos”, remarcó Arian, que añadió que además en el mismo periodo secuestraron a al menos 200 civiles.
Estas acusaciones se producen en medio de los intentos para que comiencen las esperadas conversaciones de paz entre el Gobierno afgano y los talibanes, un diálogo que debía haber empezado el pasado 10 de marzo si se cumplía un intercambio de prisioneros.
Sin embargo, las partes no alcanzaron un acuerdo para la liberación de 5.000 prisioneros talibanes y 1.000 miembros de las fuerzas de seguridad afganas, lo que les llevó a una liberación unilateral de reos que hasta ahora ronda los 650.
“La liberación de los prisioneros (…) debería acelerarse” con el objetivo de crear el marco necesario para el inicio de las conversaciones intraafganas, pidieron hoy las fuerzas estadounidenses.