Uber restablece operaciones en Colombia
Desde la mañana de este jueves, los usuarios de Uber en Colombia pueden volver a pedir servicios de transporte a través de la plataforma.
El retorno a operaciones se hace con algunos cambios, que la plataforma anuncia como temporales, y que tienen que ver con la aparición de cuatro nuevas categorías de servicios: por horas, UberYa, Economy, Comfort y XL. Las modificaciones también implican la forma de contratación de los servicios.
Sobre este último punto, la plataforma aseguró a través de un comunicado que este nuevo “modelo permitirá arrendar un vehículo con un conductor, bajo un acuerdo entre las partes al momento de la llamada. La aplicación será el punto de contacto que conecta a las dos partes para que entre ellas celebren un contrato”.
La aplicación cesó sus operaciones en Colombia el 1 de febrero de este año, luego de un fallo de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) resolviera una demanda de una empresa asociada a una compañía de taxis contra la plataforma; el pleito se basaba en competencia desleal.
Hasta el momento, no resulta del todo claro cuáles son las bases legales del regreso a operar de la plataforma, pues la inclusión de este contrato de arrendamiento podría poner al servicio más allá del espectro de aplicación del fallo que originó la salida de la aplicación. Hasta el momento, la SIC no ha emitido un pronunciamiento y el Ministerio de Transporte dijo que no hablaría al respecto en este instante.
Para Mauricio Toro, representante a la Cámara , la maniobra de Uber sí tiene validez jurídica, porque la app vuelve a operar “bajo la modalidad de alquiler de vehículos que hoy existe en la ley, está permitido. Una persona puede rentar su vehículo y otra, por medio de un contrato de alquiler, puede alquilarlo. Y eso es lo que está haciendo Uber. Pero eso no soluciona el problema de fondo: que podamos actualizar la legislación existente para que se pueda dar el servicio de transporte privado de pasajeros intermediado por plataforma, entendiendo que hay otras plataformas que operan en Colombia y que hay más que van a llegar. Hay que desuberizar el debate. Hay que permitir que esta modalidad innovadora pueda operar con tranquilidad en Colombia, equilibrando la cancha entre taxis y plataformas”.
La aplicación tiene más de dos millones de usuarios en Colombia y cuenta con 88.000 conductores asociados que, a la luz del cambio contractual anunciado este jueves, no saben si seguirse llamando socios o arrendatarios.
En conversación con Blu Radio, Samay Camacho, portavoz de conductores de Uber, dijo que “nos enteramos ayer y una de las sorpresas fue con el cambio de contrato. Ya no somos socios conductores. Ahora el tema es ser arrendatarios. Y no sabemos porque antes teníamos una aseguradora y ahora si soy prestadora de servicios voy a cubrir los gastos. Eso es ilógico porque la aplicación también genera unos recursos con nosotros. Es excelente que vuelva Uber, pero bajo las condiciones de que nos beneficien a nosotros también ahora con lo de arrendatarios”.
En un blog corporativo, Uber dijo que “este nuevo modelo, que es temporal, te permite llegar a tu destino alquilando un carro con conductor. ¿Cómo? Aceptando un contrato a través de nuestra aplicación en cada ocasión y cada producto, con un solo clic adicional”.
La plataforma asegura que este modelo está “amparado en la legislación colombiana”. Y sobre el contrato que tiene que aceptar el usuario dice que “sirve para que tú como arrendatario asegures que deseas alquilar un carro con conductor por un periodo de tiempo, haciendo uso de la tecnología que como portal de contacto aportamos. Es una formalidad entre ambas partes. Todos los contratos se terminan cuando llegas al destino elegido. Si quieres volver a alquilar otro carro, se genera otro contrato y listo».
De fondo, el cambio que acaba de implementar la app no soluciona el problema de fondo que se ha planteado durante años entre reguladores y la plataforma: este y el Gobierno anterior le han dado a entender a Uber que es bienvenido si quiere operar, pero que se habilite como empresa de transporte. La compañía no lo ha hecho, pues llegó al país afirmando que su ADN es tecnológico: el de una plataforma que, usando internet, simplemente media entre una oferta (un vehículo disponible) y una demanda (el usuario que necesita transportarse).
Vale la pena aclarar que actualmente hay mesas de discusión lideradas por el Gobierno en las que participan diferentes actores para intentar llegar a una regulación que permita la operación legal de este tipo de opciones de movilidad, pero también equilibrando el escenario con los taxis. Uno de los cambios que podría emerger de estos debates es que los reguladores desistan de pedirle a Uber (y plataformas similares) que se constituyan como empresas de transporte, pero sobre este particular no hay nada concreto hasta el momento, según han informado personas con conocimiento de las discusiones.
Hasta hoy, el Congreso de la República ha intentado (sin éxito) regular a Uber en Colombia en por lo menos cinco ocasiones. elespectador