Urgencia manifiesta de un organismo rector
Por: Jorge Nain
Con bastante preocupación recibí la noticia de que en los primeros días del mes de octubre no se realizó la versión 2019 del Festival Voces y Canciones de La Paz (Cesar), evento que completaba más de veinte años efectuándose en ese lindo municipio, ‘Capital de la Almojábana en Colombia).
Pero, este no es el único festival de música vallenata que corre el riesgo de extinguirse; hace rato vengo insistiendo en que se requiere con urgencia un ente rector de los festivales, y que en principio debería ser el Ministerio de Cultura, pero para qué hacernos ilusiones, cuando el pobre Ministerio no tiene ni la gente, ni la plata para eso.
Estoy convencido de que la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata es la única entidad que tiene el conocimiento y la experticia para guiar, asesorar y hasta patrocinar los festivales vallenatos del País; ellos tienen el ‘know how’ y también el ‘good will’ para hacerlo, y sin duda el papá de los festivales vallenatos en Colombia es el de La Leyenda Vallenata, y a mi juicio, deberían asumir ese rol, porque ya lo han hecho con algunos eventos como el Festival Tierra de Compositores de Patillal, Cesar.
Por eso, es que les propongo que al interior de la Fundación se organice una dependencia que se encargue de estudiar la situación de los festivales vallenatos en el País, que reúna a sus presidentes, los asesore y se convierta en un organismo de apoyo y control de estos eventos.
A continuación, me permito sugerir algunos temas de los que se puede ocupar la FFLV como organismo central, rector y de control de la Asociación de Festivales Vallenatos de Colombia:
– Organizar la Academia Nacional de Jurados con sede en Valledupar, donde se realicen capacitaciones, por lo menos dos veces al año, a los potenciales jurados de todos los festivales vallenatos del País.
– Capacitar a las juntas directivas de las fundaciones o entidades organizadoras de los festivales sobre temas como formas de financiación, publicidad, logística y protocolo.
– Certificar con el sello de la FFLV a aquellos festivales que reciban la asesoría, el apoyo y control del organismo rector.
– Apoyar con el patrocinio, de por lo menos uno, de los concursos o premios de cada festival que tenga el sello de la FFLV.
– Realizar auditoría contable, operacional y administrativa de las fundaciones y entidades organizadoras de festivales en Colombia.
– Avalar y recomendar a los festivales certificados con posibles sponsors de este tipo de eventos.
– Crear un medio de comunicación de circulación nacional (Revista o Periódico), que promueva y dé a conocer los diversos eventos certificados, fechas y atractivos.
En términos generales, no podemos seguir permitiendo que la función que cumplen los festivales vallenatos con relación a nuestra música se pierda o tergiverse, porque estos eventos a veces caen en manos de personas inescrupulosas, o en otros casos, son extremadamente politizados, situación que los lleva a la muerte.
COLOFÓN: Señores directivos de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, es hora que asuman la gran responsabilidad de asesorar, guiar, promover, controlar y velar por la buena marcha y supervivencia de los festivales vallenatos en Colombia.