Sencillamente, Luis Alberto

Aún en los momentos más difíciles, Luis Alberto Monsalvo Gnecco se muestra como un hombre sereno y tranquilo. Su personalidad lo ayuda. Desde niño nunca se destacó por ser el más expresivo o elocuente, pero si era el más organizado, disciplinado y puntual. Esas características fueron moldeando al hombre de hoy, un líder en todo el sentido de la palabra, que ha encontrado en el servicio a los demás, su razón para vivir.

Su inmensa capacidad de trabajo, reflejada en el cumplimiento de metas que desde diferentes ámbitos ha asumido con éxito, su visión innovadora que le ha permito sobresalir como un joven dinámico y creativo, y su arraigado interés por servir a la gente que más lo necesita, lo han catapultado como un joven líder, de esos que poco abundan, pero que cuando salen a la luz, brillan naturalmente.

Es mesurado, camina de manera tan serena que pareciera que cada paso contuviera una idea por realizar, un sueño por cumplir, una meta que alcanzar o un objetivo al que llegar. Y sí, así es, todo en su vida se desarrolla de manera planificada, concertada al lado de su equipo y a quienes siempre consulta, porque entiende que la construcción de las buenas ideas y propuestas, siempre deben contar con diferentes puntos de vistas.

Algunos han confundido su timidez con arrogancia. Lo cierto es que Luis Alberto, es un tipo de pocas palabras, pero cuando las dice, es contundente, preciso y evidentemente un hombre ilustrado, de una inteligencia sencilla, sin discursos ensordecedores, sin un solo interés de protagonismo. Es, entre otras cosas, un hombre que comparte conocimiento de manera generosa, y un maestro natural.

Es por esa razón que estar cerca a las comunidades, a su gente, a quienes lo necesitan, se ha convertido en un pilar de su vida. Rechaza la deslealtad, y lo tiene como principio, por eso quienes lo rodean, entienden su interés por trabajar al lado de gente con iniciativa, propositivos, comprometidos y apasionados, características inmersas en su personalidad.

No se rinde nunca, es incisivo en la búsqueda de hacer siempre las cosas bien y sacarlas adelante, le gusta estar en el paso a paso de todo lo que hace, delega o asigna, porque su mayor premio, y su más grande regalo, siempre será la sonrisa de aquellos a los que ve disfrutando de todo lo que con el corazón, logró o hizo por los demás.

De todos los adjetivos posibles, muchos podrían definirlo, pero solo uno lo describe con tal fuerza, que al decirlo, todos reconocerían sin duda, su acierto: Luis Alberto Monsalvo Gnecco, es un hombre INTEGRO.

Por: Lely Maya de Murgas