25 de noviembre
Actualidad

Corte Suprema remite a la JEP proceso contra la excongresista Zulema Jattin por “parapolítica”

La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia anunció que remitió a la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, el expediente de juicio por “parapolítica” contra Zulema Jattin, atendiendo la petición que en este sentido formuló la propia exsenadora ante el alto tribunal.

En su providencia, la Corte Suprema precisa que la excongresista de Córdoba por el Partido de la U., manifestó su voluntad de someterse a la JEP de manera libre y voluntaria desde el pasado 3 de abril.

Zulema Jattin fue capturada por orden de la Corte Suprema de Justicia en mayo de 2009 para ser procesada por sus presuntos vínculos con los grupos paramilitares.

Según lo estableció el alto tribunal, la entonces senadora de la República, hizo alianzas políticas con los paracos que operaban en Córdoba entre los años 2001 y 2007.

Con Zulema Hattin son ya cuatro los procesos contra excongresistas enjuiciados por parapolítica que llegan a consideración de la Jurisdicción Especial para la Paz.

Los primeros fueron los excongresista Juan José Chaux Mosquera, David Char y Álvaro Ashton.

No obstante, solo el caso de Chaux Mosquera es el que ha cumplido los requisitos. La misma Corte estableció que los hechos por los cuales se le enjuicia se sucedieron en la época tenía la calidad de “agente del Estado”, era senador y, además, que los mismos sí guardaban una relación, al menos indirecta, con el conflicto armado.

En lo que respecta a Char y Ashton, la Corte dejó en manos de la JEP decidir su situación y al efecto, inicialmente (en mayo pasado) la Jurisdicción para la Paz rechazó su aceptación pues los magistrados consideraron que los delitos por los cuales son investigados no estaban relacionados con el conflicto armado, y en ese sentido, que no eran de conocimiento de esa jurisdicción.

Sin embargo, en agosto pasado, la sección de Apelación de la Jurisdicción Especial para la Paz revisó la decisión y cambió de posición, considerando que sus presuntos delitos sí pueden considerarse conexos con el conflicto armado.

Sin embargo, advirtió que en definitiva se les aceptaría “siempre y cuando cumplan el régimen de condicionalidad”.

 

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